jueves, 29 de marzo de 2012

Lo que nadie preguntó

Lejos, aquella definición donde me encuentro entre la niebla de mis ojos y la oscuridad que nada cabe más que la desolación, lo que nadie pregunta es como en realidad me siento y pierdo los sentidos cada vez que mi individuo se encuentra desnudo ante el dolor, oh dolor que no se como poder hacerte desaparecer...si mi mirada se pierde entre tanto ruido es por la desesperación que mi alma no puede soltar, de mis momentos en silencio y de has lágrimas que escondo para dejarlas escapar; sí tú supieras lo que mi corazón ha tratado de arreglarse, de sobreponerse ante los siniestros pasos que enumero a diaro para no tratar de perderme. Lo único que me queda es el suelo que me sostiene para no caer y cortar el vuelo que ya no tanteo tanto como una esperanza.

Todo lo que puedo hacer es callar.

Pues aquel tesoro de ilusiones y futuros planeados por ti y por mi, lo arrebataste en el segundo menos pensado y corriste tanto sin detenerte para esconderte detrás de una puerta que no se permite abrir, y en el momento que mi vida otorgo distracción adelante de aquella madera irrompible has construido tantos muros, tantos silencios, tantas censuras, y yo nunca fui advertido, me deje llevar por la corriente del mar de tus labios, pero nadie me preguntó si aceptaba la incertidumbre y la pérdida de esperanza que poco a poco siento. Tanto he aguantado, resisto sin cuestionar, cuantas guerras mi corazón ha aguantado y ahora no se como proseguir, pues a veces preferiría cerrar los ojos y otras ocasiones me aferro a lo único que me queda: esperanza.

Porque creí en tus palabras y las enunciaciones de tu amor por mi, de tu mano sobre la mía y los labios susurrando a los míos, nunca he renunciado a ti. ¿No puedes ver cuanto hemos aguantado este trazo amargo para poder amarnos, cuantos caminos tuvimos que tomar y ahora te siento en algo tan lejano?
Y ahora, ni preguntas por mi, rechazas mis manos, mi tiempo, el espacio, mis cariños, mis ojos, mi futuro, mi presente, mis pensamientos, los recuerdos, los silencios, mi compañía, mis besos, mi ayuda, no deseas nada de mi, lo que me pregunto es sí en verdad me amas, sí en verdad deseas aún estar conmigo toda la vida, sí aún sientes aquella cosquilla que te hablaba de un para siempre, yo no sé. No lo sé, parece no interesarte saberme bien, puedo no buscarte y tú no lo entenderías, ¿qué circunstancias fueron en las que me alejaste? ¿Las nuevas? ¿Fue mentira todas las palabras y abrazos? ¿Fueron temporales y que sólo tuvieron valía en el segundo pronunciadas?

Tanto te amo que dejo de ir compromisos y títulos, no me importan, pues siempre hubo algo más grande y aquello eran los sentimientos, no hay pertenencia, no la hay, pero no puedo ignorar que mi corazón esta de por medio, así me siento, como hace poco fui pleno, ahora estoy vuelto loco, ahora me pierdo, ahora me quiebro, mi corazón esta hecho pedazos, tiempo, paciencia y comprensión pero hacia mi no existen, no las cuestionas, sí te dejo ir cada día y no vuelves... No me importan los compromisos cuando el mayor no tiene reglas y ese es el amor, el futuro, los sueños...

Y ahora estoy aquí, escribiendo algo que nunca preguntaste, dudando, quiero estar contigo pero ahora ni conocernos permites, en cuantos muros la puerta se esconde, has logrado un desapego perfecto y todo aquello resulta en que no distingo sí todo es verdad o todo ha sido mentira... o por lo menos saber sí siempre quisiste estar conmigo en algo eterno, en unirnos, en crearnos, en sanarnos, en vivirnos y morirnos. No te puedo olvidar, no lo quiero, no me quiero ir, no hay oportunidades en esta vida más que puedan conseguirnos los ángeles, sólo busco una reafirmación, a veces las cosas buenas que pensamos resultan peores si perdemos la visión de nuestras metas, la mía eres tú. Lo que nadie preguntó es cuanto más he de resistir para llegar a ti... lo cual por más que lo enfrento no lo comprendo. Cada día te pierdo más, te desconozco más, lo siento, lo percibo, cada día huyes más, como sí yo te hiciera mal, nadie es el diablo aquí, tan sólo dame una señal, un escalón más, un muro menos, un silencio menos.

7 comentarios:

  1. no sé bien qué decir...
    porque lo que escribiste es tan bello, no porque sea perfecto sino porque es la más pura verdad, y como tal, al leerla puedo empaparme de ella y sentirla, de hecho la siento, me siento igual...
    amando lo inamable y destruyendo todo a cada momento... es sorprendente saber que el amor lleva tanto dolor incluido; y saber que tan solo te completas para volves a despedazarte...

    espero te ame...

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  2. Yo igual lo espero en verdad dia a dia lo hago, como una señal de vida, un regreso a mis brazos, lo unico que hago es vivir para que los caminos me unan a ella. Gracias Ann!

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  3. Pasión, verdad y belleza. Perfecto. Me hace desear que en verdad sus caminos se unan.

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  4. Pues nunca se unieron :) ahí está la belleza del asunto

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  5. No dejas de sorprenderme :)

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  6. aún no vuelves de tu ida al mundo real? extraño leerte

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  7. Es una entrada muy bella. Has encontrado palabras para eso que todos hemos sentido en algún momento de nuestras vidas. Leerte revive con precisión viejas sensaciones. Te admiro mucho.

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